jueves, 30 de diciembre de 2010

Otro día después

Si hay algo que siempre me molestó, es la actitud de las personas de cagarse en todo, o no; simplemente, la actitud de dejar pasar, ignorar, desconocer, olvidar.
Así me pasó, no es que yo no me haya acordado de lo que pasó un 30 de diciembre hace 6 años (La fecha dice 30 simplemente para que no se junte esta entrada con la que escriba mañana), pero "no tuve tiempo" para ver que quería decir en mi neonato blog al respecto, ni mencionarlo en facebook, en el pasado de moda fotolog o en twitter. Eso me hizo pensar, en como cada vez menos se escucha por ahí a gente mencionando la palabra "cromañón" (aunque, con tanto boludo opinando, en una de esas hasta es mejor), en como callejeros dejó de existir, y en como tantos otros, como hoy yo, dejaron de hacer el pequeño esfuerzo para ejercitar este tema de la memoria.
No tiene nada que ver decir que todo me sale mal y que por eso no tuve tiempo de intentar escribir, cuando yo estoy viva y sin verdaderos daños cercanos, un 30 de diciembre poco feliz para muchos. Así que no sucederá en este post.
Después de una seguidilla de años de asistir a las marchas y actos conmemorativos, al principio sin saber muy bien si lo hacía por ser una fan pelotuda, o porque en verdad quería aportar mi inutil grano de arena a la hija de puta situación; por primera vez no estuve en condiciones de asistir, gracias a mi ceguera temporaria.
Es un día por demás triste, y poco aprovechado, cada vez mas olvidado, y cruzado por intereses que, en ocasiones, nada tienen que ver con el asunto. Pero a mi me pasa que de solo pensar que entre esas 194 personas podría haber estado yo, se me pone la piel con puntitos (¿puntitos? ¿que decis?).
No me gustan esas cosas que se dicen... "Memoria", "Justicia"; porque es mucho mas que eso. Es ver que la gente no tiene que cagarse en la gente, que hay un pais, un mundo entero, que necesita cambiar, y que la memoria no es hacer presencia, sino hacer la diferencia.
Justicia y memoria, entonces no es encontrar culpables, cosa que no deja de ser importante; generar odio, rencores, posturas y arruinar las vidas que quedaron tambaleando, pero en pie. Justicia y memoria, es no olvidar, para que las cosas no vuelvan a pasar, pero no es nada mas no olvidar. Justicia y memoria es cambiar, cambiar todos, y cambiar todo. Cambiar los músicos, cambiar los empresarios, cambiar los pendejos, cambiar los padres, cambiar la gente que no tiene nada que ver, cambiar, para que cosas como ésta no se repitan, y no haga falta odiar mas.
Cada vez que cruzo un semáforo en rojo, aunque es una comparación en verdad estúpida, pienso que estoy yendo encontra de la ley, que puedo morir atropellada, que puedo hacer que autos choquen y que deberían cobrar multas por eso. Claro que al final, que yo cruce mal no le hace daño real a nadie. Pero desde muy abajo se empieza, otra actitud, siempre puede llegar a significar otro resultado.
Ya lo se, soy una ilusa, pero me gusta escribir sobre mi manera de pensar, me gusta creer que el mundo puede cambiar, y que la justicia no es hacer que los boludos de turno sufran en la carcel o se caguen pagando multas millonarias.
Me gusta creer que la justicia y la memoria algun día van a existir, y van a reemplazar a la indiferencia. Me gusta hacer, a mi modo, justicia y memoria, cada 30 de diciembre.

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